martes, 1 de diciembre de 2009

Ruleta Rusa

Brocheta de pollo con arroz frito. CLICK.
Filete de Ternera a la plancha con ALOKO (plátano frito). CLICK
Sauté de Patata. CLICK
Pizza 4 Quesos. CLICK.
Coca-Cola. CLICK.
Sandwich Club de Pollo. CLICK. Con huevo. CLICK. Y Mahonesa. CLICK CLICK.
Jack Daniel’s con hielo. CLICK.

¡¡¡BUFFFF!!! Por ahora me he librado de que cada vez que aprieto el gatillo (es decir, como o bebo cualquier cosa que te sirvan por aquí) me toque la bala, es decir, una infección gastrointestinal de muchos tipos y niveles, bacteriana o vírica, de dos días o de una semana. De hospitalizarte o de repatriarte.

Todo aquel que pasa una larga temporada por estos países y debe comer siempre fuera acaba cayendo alguna vez por la comida o la bebida. Es la ley por aquí, y uno de los temas de conversación habituales por aquí (mira, ahí no se come mal, pero me tiré 4 días en cama la última vez que fui…). Es algo que pasa en la mayoría de lugares que hay por aquí, así que por muy de confianza que sea el lugar y muchas veces que comas allí sin que te pase nada, tarde o temprano te toca la china y algo invade tu interior de forma violenta. ¿Los motivos? Bueno, creo que el concepto de “Cadena de frío” no se sigue a rajatabla por estos lares, al igual que el significado de higiene, limpieza y desinfección. De puertas afuera intentan que todo parezca lo más profesional posible (te abren la botella pero no te dejan que quites tú la chapa, todo lo que traen intentan cogerlo con servilletas o precintado…) pero claro. Dentro de la cocina ya es otro cantar, al igual que el transporte y entrega de mercancías (creo que aún no he visto ni un solo camión frigorífico).

Lo único que puedes hacer es intentar seguir reglas básicas, como no tomar hielo a menos que sea indispensable (como en un Gin Tonic, por ejemplo), no pedir cosas con salsas extrañas o mayonesas, pedir que la carne esté bien hecha y tener una lista de sitios más o menos seguros. A partir de ahí, sólo te queda confiar en tu suerte o en la dureza de tu estómago.

Aun así, es muy probable que caigas. Cuantos más días estoy aquí comiendo en restaurantes, más cerca está mi bala. Sólo es cuestión de tiempo.

2 comentarios:

  1. Si en su momento hubieras habituado al estómago comiendo la tipica merluzita a a la riojana precocinada pues ahora lo tendrias a prueba de bombas, jajajaaja.
    Venga chaval un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Bueno piensa en el lado bueno.. disfruta de la comida africana diferente (comer cocodrilo, serpiente..) y se te va a inmunizar el estomago para cuando vuelvas.
    Besos.
    Raquel.

    ResponderEliminar